El S&P/CLX IPSA es un reconocido benchmark de renta variable en Chile, que abarca casi 90% del mercado de valores y funciona como índice principal para una amplia gama de índices S&P/CLX. Exploremos de qué manera la alianza entre S&P Dow Jones Indices y la Bolsa de Santiago está proporcionando un diverso conjunto de herramientas a aquellos inversionistas que buscan acceso a los mercados chilenos, que se encuentran en constante evolución.
- ¿Qué incluyen los índices S&P/CLX de renta fija, que buscan seguir el rendimiento de bonos del mercado chileno?
Jaime: Los índices S&P/CLX de renta fija incluyen dos series amplias de índices soberanos, de tasa nominal y de tasa real, conocidos como S&P Inflation-Linked Indices. Como se aprecia en la figura 1, estos índices están divididos según vencimientos a largo plazo y a corto plazo. Los “nodos” o segmentos de vencimiento detallados incluyen plazos de 0-1, 1-3, 3-5, 5-7, 7-10 y 10+ años, mientras que los nodos de vencimiento agrupados contienen plazos de 0-1, 1-5, 5-10 y 10+ años. Ambos conjuntos de índices y los índices de referencia o benchmarks, que abarcan la curva nominal y real por completo, son calculados en dólares (USD). - ¿Por qué se separó a los índices de esta manera y por qué se emiten en una moneda que no es local?
Jaime: En primer lugar, porque es importante contar con índices en diferentes monedas (en este caso, en dólares) para que puedan ser usados tanto a nivel local como por inversionistas internacionales. Los índices están segmentados según vencimientos, porque la curva no se mueve de la misma manera en el corto plazo que en el largo plazo y por ello existen referencias detalladas que pueden usarse como benchmarks en el caso de aquellos administradores de activos con estrategias de bonos a corto, mediano y largo plazo. Nuestro objetivo era desarrollar un conjunto de herramientas capaz de proporcionar informaciones para orientar a los inversionistas en diferentes partes del mundo y que pudiera aplicarse en diferentes estrategias. Los índices S&P/CLX también pueden funcionar como base para productos de inversión, tales como ETFs o fondos indexados, ya que son fáciles de replicar. Esto llevaría a una manera más transparente y líquida de adaptar las asignaciones de activos para alcanzar metas de inversión