Con el año 2019 llegando a su fin, los inversionistas pueden usar su tiempo para evaluar su cartera y qué cambios (si alguno) les gustaría realizar con base en las expectativas de rendimiento y perspectivas sobre el mercado. Si bien el futuro es incierto (2020 será la retrospectiva cuando haya que evaluar los rendimientos para el año siguiente), los movimientos del mercado durante 2019 pueden entregarnos un mayor contexto con respecto a dónde nos encontramos y hacia dónde nos podríamos dirigir.
2019 ha sido un año positivo para las acciones de EE. UU.
En contraste con las expectativas más sombrías a principio de año, 2019 ha sido mayormente positivo para las acciones de Estados Unidos. El S&P 500 ha registrado 26 máximos históricos y su rendimiento total en lo que va del año es de 27.4%, seguido por el S&P MidCap 400 (+22.89%) y el S&P SmallCap 600 (+19.90%), que también tuvieron resultados positivos. Desde un punto de vista más amplio, 42 de los 45 índices de sectores y estilos basados en el S&P 500, S&P 400 y S&P 600 han presentado alzas en lo que va de 2019. La excepción fueron las empresas de energía de capitalización media y baja, así como las compañías de servicios de comunicaciones de baja capitalización.